Mark Shuttleworth recently critized Jonathan Riddell for proposing Xubuntu and others join the Kubuntu community. I thought I could make a few amendments to Mark’s writing:

Jonathan Mark says that Canonical Kubuntu is not taking care of the Ubuntu community.

Consider for a minute, Jonathan Mark, the difference between our actions.

Canonical Kubuntu, as one stakeholder in the Ubuntu community, is spending a large amount of energy to evaluate how its actions might impact on all the other stakeholders, and offering to do chunks of work in support of those other stakeholder needs.

You, as one stakeholder in the Ubuntu community, are inviting people to contribute less to the broader project [all the X and Wayland -based desktops], and more to one stakeholder [Unity and Mir].

Hmm. Just because you may not get what you want is no basis for divisive leadership.

Yes, you should figure out what’s important to Kubuntu Ubuntu Unity and Mir, and yes, you should motivate folks to help you achieve those goals. But it’s simply wrong to suggest that Canonical Kubuntu isn’t hugely accommodating to the needs of others, or that it’s not possible to contribute or participate in the parts of Ubuntu which Canonical Kubuntu has a particularly strong interest in. Witness the fantastic work being done on both the system and the apps to bring Ubuntu Plasma to the phone and tablet. That may not be your cup of tea, but it’s tremendously motivating and exciting and energetic.

See Mark? I only needed to do a little search and replace on your words and suddenly, meaning is completely reversed!

Canonical started looking only after its own a couple of years ago and totally dumped the community. Many people have noticed this and written about this in the past two years.

How dare you say Jonathan or anyone from Kubuntu is proposing contributing less to the broader community? The broader community uses X and/or Wayland.

Canonical recently came with Mir, a replacement for X and Wayland, out of thin air. Incompatible with X and Wayland.

No mention of it at all to anyone from X or Wayland.

No mention of it at FOSDEM one month ago, even though I, as the organizer of the Cross Desktop DevRoom, had been stalking your guy for months because we wanted diversity (and we got it: Gnome, KDE, Razor, XFCE, Enlightenment, etc, we even invided OpenBox, FVWM, CDE and others!). I even wrote a mail to you personally warning you Unity was going to lose its opportunity to be on the stand at FOSDEM. You never answered, of course.

Don’t you think Mir, a whole new replacement for X and Wayland, which has been in development for 8 months, deserved a mention at the largest open source event in Europe?

Come on, man.

It is perfectly fine to say “yes, Canonical is not so interested in the community. It’s our way or the highway”.

But do not pretend it’s anything else or someone else is a bad guy.

In fact, is there any bad guy in this story at all!? I think there is not, it’s just people with different visions and chosen paths to achieve them.

Maybe Mir and Unity are great ideas, much better than X and Wayland. But that’s not what we are talking about. We are talking about community, and Canonical has been steadily destroying it for a long time already. If you cannot or do not want to see that, you’ve got a huge problem going on.

 

Lo sé, lo sé: “¿¡mal pagados!? ¡Pero si un concejal, ministro, presidente del Gobierno, etc cobran 80.000 EUR prácticamente libres de impuestos!”

Pues es un sueldo bajo, mira por donde.

 

Los sueldos de los políticos

Hace unos días, el Gobierno de Mariano Rajoy aprobó un proyecto de ley por el que el sueldo máximo de concejales y alcaldes será el mismo que un diputado: no llega a 69.000 EUR al año.

El Presidente del Gobierno cobra algo más, unos 78.000 EUR.

 

Casos reales

El señor Pizarro ganaba unos 10 millones de euros al año en Endesa. Cuando fue elegido diputado por el Partido Popular pasó a ganar unos 65.000 EUR al año. En los 2 años que fue diputado, Manuel Pizarro perdió, en números redondos, 20 millones de euros. Probablemente más, porque no estamos contando los paquetes de acciones, opciones sobre acciones, jubilaciones, etc.

Luis de Guindos, actual Ministro de Economía, cobraba más de 300.000 EUR al año como consejero de varias empresas. Ahora gana la cuarta parte, es uno de las personas más odiadas de España y no sé cómo duerme por las noches.

Hay más casos: Pedro Morenés (Ministro de Defensa del Gobierno Rajoy, ex-presidente de MDBA), Pedro Argüelles (Secretario de Estado de Defensa, ex-presidente de Boeing España), etc

 

Pero son raros

Visto que en la empresa privada se gana mucho más que en la política, lo normal es que el cambio vaya en sentido contrario: pasar de la política a la empresa privada.

Casos hay muchos: Felipe González, José María Aznar, Elena Salgado, Pedro Solbes, Eduardo Zaplana, Jordi Sevilla, Josu Jon Imaz, Josep Piqué, en fin, mil.

 

Gestores inútiles

Visto lo visto, ¿a alguien le extraña que estemos gobernados por inútiles? ¡Es la evolución natural!

  • Si uno es bueno en su trabajo, gana mucho más en la empresa privada que en la política
  • Si uno es un inútil, en la empresa privada no se va a “comer un torrao”, así que se mete a política.

 

Corolario

Los inútiles se meten en política, hacen contactos y con su gestión destrozan la economía. Al poco de dejar la política, pasan a la empresa privada, donde ganarán mucho dinero en empresas a las que “casualmente” beneficiaron mientras estaban en política.

 

La solución

Menos políticos, muchos menos, pero mucho mejor pagados: ¿cómo vamos a encontrar un ministro de Economía capaz si sólo pagamos 69.000 EUR al año?

Los únicos dispuestos a aceptar un cargo así son unos pocos gestores buenos que tienen vocación política (se cuentan con los dedos de una mano), o una caterva de políticos inútiles que quieren usar el cargo como lanzadera para irse luego a la empresa privada y ganar mucho más. Abundan los segundos.

(Todo lo dicho sobre ministros y presidentes del gobierno se aplica idéntico a concejales, alcaldes, diputados autonómicos, presidentes autonómicos, etc)

 

Wikipedia tiene un buen artículo sobre el Protocolo de Kioto:

El Protocolo de Kioto sobre el cambio climático2 es un protocolo de la CMNUCC Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático , y un acuerdo internacional que tiene por objetivo reducir las emisiones de seis gases de efecto invernadero que causan el calentamiento global: dióxido de carbono (CO2), gas metano (CH4) y óxido nitroso (N2O), además de tres gases industriales fluorados: Hidrofluorocarbonos (HFC), Perfluorocarbonos (PFC) y Hexafluoruro de azufre (SF6), en un porcentaje aproximado de al menos un 5%, dentro del periodo que va desde el año 2008 al 2012, en comparación a las emisiones al año 1990.

La realidad

Bueno, esa era la intención. Lo que ha sucedido en realidad ha sido:

  1. Muy pocos países han conseguido reducir las emisiones de CO2
  2. Se creó un mercado de “aire limpio”, en el cual los países que excedían en sus emisiones de CO2 compraban “no emisiones” a los países que sí cumplían. Un anglosajón diría que literalmente hemos creado un mercado “out of thin air“. Yo lo completaría con un “out of thin clean air”

En cuanto al primer punto, hay que destacar que España es uno de los países más idiotas del Protocolo de Kioto: asumimos unos compromisos irrealizables, a los que en realidad nadie nos obligaba, y en lugar de abandonar el Protocolo, como hicieron el resto de países que no iban a cumplir (Estados Unidos, Canadá, etc), seguimos y hemos pagado y vamos a pagar un dineral.

En cuanto al segundo punto, en realidad los países “contaminadores” no están comprando a países “limpios”, sino (mayoritariamente) a países subdesarrollados, que simplemente no contaminan más porque no tienen industria, no porque su industria sea eficiente.

 

¿Y España?

España ha fracasado absolutamente en todo: no hemos cumplido con las emisiones, y en lugar de abandonar, seguimos porque somos “buenrrollistas”, y como consecuencia vamos a pagar unos 800 millones de euros por el periodo 2008-2012.

Ya es demasiado tarde para ahorrarnos esos 800 millones de euros (la fecha límite era el 31 de diciembre de 2011), pero lo que sí podemos hacer “darnos de baja” del “club post-Kioto“.

 

¡Contaminador! ¡Antiecológico! ¡Asesino de la Naturaleza!

Para el carro.

Me gustaría que cumpliéramos con Kioto, con Durban y con Bali, pero ya que no vamos a poder hacerlo, y ya que tenemos la economía hecha trizas, lo mejor es que nos borremos y que lo hagamos lo mejor que podamos.

Y sin pagar estúpidas sanciones autoimpuestas.

Prefiero destinar esos 800 millones de euros a mil cosas más importantes.

 

Apparently HTML5 applications are the best thing after sliced bread.

HTML5 is the first platform any mobile vendor supports: iPhone, Android, Windows Phone, BlackBerry, Symbian. All of them.

Windows 8 is said to promote HTML5 as the preferred application development solution.

I used to look kindly at that. But about a month ago I started to get worried: is HTML5 good for everything?

Long-lived applications

In military, industrial, warehouse management, medical, etc is not rare that bespoke applications are developed and stay in use for many years (and I really mean many: 10, 20 or even more!) with barely an update. It’s not rare that those applications only receive very small updates once very 5 years. Those applications, not Angry Birds, are what keeps the world running: troops know what supplies they can count on, iPhones are manufactured, FedEx is able to deliver your package and your doctor is able to check your health.

But now that everybody seems to be moving to HTML5 webapps, what happens when my warehouse management application is a webapp and the additions in the newest browsers make the webapp no longer work?

Are vain upgrades the future?

Say my webapp is released in 2014 and it works fine with Firefox 14.0 and Chrome 26.0, the newest browsers when I release the application in 2014. Fast-forward to 2020 and Firefox 14.0 and Chrome 26.0 do not even install on Windows 10 computer! What’s the solution?

Should the customer pay for a huge update and redesign to make it work with Firefox 27.1 and Chrome 41.0 in 2020?

A virtual machine with Windows 8 and Firefox 14.0? A portable Mozilla Firefox 14.0 on Windows 10 in 2020 to be able to use that line-of-business application that only requires a small update once or twice every 5 years? How are the virtual machine and/or Portable Firefox 14.0 different from or better than a fat client? What’s the advantage? I’d say none!

Native applications usually do not have that kind of problems because APIs are much more stable. You can still run Win16 applications on Windows 7!

You don’t believe me? We may soon be developing for 76 browsers!

While HTML5 may be fine for applications which are updated very often, it makes me feel very uneasy to see it used in environments where applications will be rarely updated, such as SCADAs, warehouse management, control system, medical records, etc.

A solution is needed

It looks like that choice of technology is going to make those applications much more expensive in the medium and long term, paying for “adaptations to new browsers” (sorry, I resist to call “update” or “upgrade” to something that adds zero value other than being able to run on a newer browser).

Or maybe it’s about time to define actual “HTML5 profiles”. ACID3 seems to be too weak of a profile: two very different browsers may pass ACID3 yet a webapp would work with one browser and fail with the other due to bugs, missing features/added features, etc.

Something needs to be done.

Hace un par de meses Martín Varavsky se preguntaba porqué apenas hay premios Nobel españoles. No es la primera vez que lo hace, ni el único.

Llevamos años escuchando que la productividad de las empresas españolas es muy baja. Que tenemos demasiadas vacaciones, demasiados puentes, que trabajamos poco. Y sin embargo la realidad es que estamos más horas que ningún otro país en el trabajo, y que cuando uno echa cuentas, no hay tantos festivos ni vacaciones con respecto a otro país. ¿Qué falla?

Igual frío un alfiler que coso un huevo

Pues creo que tiene algo que ver con que el 99% de las empresas españolas son PYMEs, muchas de ellas incluso microempresas (menos de 10 trabajadores y 2 millones de euros de facturación).

En España tenemos fundamentalmente empresas pequeñas y muy pequeñas que intentan dar servicio de todo y a todos.

Cuando uno se pone a mirar los epígrafes del IAE en los que está dada de alta una empresa, se queda a cuadros: es habitual que una empresa de pinturas esté dada de alta (y “ejerza”) también en actividades informáticas, electricidad, albañilería y pequeños trabajos de construcción, construcción de bicicletas y hasta en astrólogos y similares si se tercia.

Como dice la sabiduría popular, el que mucho abarca poco aprieta: el resultado de querer hacer de todo es trabajadores no especializados que igual pintan un pared, que instalan un router o le hacen una estantería de madera a medida, se la pintan y se la instalan.

¿Qué hay de malo en esto? Que se pierde mucho tiempo formándose en lo básico de cada cosa, y por tanto la productividad es bajísima. Y ojo, que no es que le eche la culpa a las PYMEs por querer hacer de todo, es que muchas veces uno se ve obligado: o lo hago, o no me encargan la “faena”.

“Lo siento, no está en mi área de responsabilidad”

Comparemos con lo que ocurre en otros países. Por ejemplo, Alemania, que parece ser el summum de Europa ahora mismo.

En Alemania hay fundamentalmente empresas medianas y grandes. Tener mucho personal se traduce en tener personal especializado, que no pierdee tiempo formándose en lo básico, sino perfeccionando y avanzando en los aspectos más remotos. ¿Qué es esto? Alta productividad. Soluciones únicas y extraordinarias. Patentes, royalties y Premios Nobel, entre otros.

Claro, que las empresas grandes tampoco son la panacea:

  • Suelen ser muy inmovilistas. Nadie se arriesga a proponer o intentar algo que tenga la más mínima posibilidad de resultar fallido, porque le condena al ostracismo. Experiencia personal: trabajar para empresas grandes desde fuera me ha permitido llevar a cabo esos “golpes de Estado” sin temor a que me corten la cabeza.
  • Esa alta especialización a veces lleva a situaciones absurdas en las que nadie quiere mojarse. Típico problema con los alemanes: en una situación en la que se requiere un 40% de conocimientos de X, un 40% de conocimientos de Y y un 20% de conocimientos de Z, va uno a pedirle ayuda al experto en X, al experto en Y y al experto en Z y todos y cada uno de ellos responden “ah… pero es que aquí hay una parte que se sale de mi área de conocimiento, no puedo ayudarte”. Preguntas quién puede ayudarte, y o se pasan la pelota de unos a otros, o directamente te dicen “otra persona, yo no”. Y se quedan tan frescos. Palabrita del niño Jesús que esto me ha pasado ya bastantes veces.

El equilibrio

Las empresas grandes tienen los recursos para cubrir todo el dominio del problema con personal especializado y poner a gestores para coordinar a esos expertos.

Las empresas pequeñas tienen menos burocracia, arriesgan más (muchas veces inconscientemente) y pueden innovar más rápido.

Creo que en España las PYMEs “genéricas” deberían asociarse y formar empresas más grandes, no necesariamente una única empresa, sino un consorcio u otro tipo de asociación empresarial estrecha, de forma que actúen como una única empresa de cara al cliente. En lugar de hacer cada indio la guerra por su cuenta, hay que echar mano de la formación en tortuga.

Con esto dejaríamos “vía abierta” a otro tipo de PYMEs, las hiperespecializadas, aquellas que serían expertas en una única cosa. De esta forma conseguiríamos gran productividad y retorno en forma de patentes, que es justo lo que sucede en EEUU e Israel.

El problema: no puede haber empresas pequeñas especializadas si no tienen clientes. ¿Quiénes son sus clientes? Normalmente empresas grandes que se dan cuenta de que tienen una necesidad concreta y pueden permitirse pagar por una solución externa. ¿Tenemos empresas grandes en España? Pocas, muy pocas, casi se cuentan con los dedos de una mano.

Hace falta un “balance saneado” de empresas pequeñas ultraespecializadas y empresas grandes que puedan contratar a esas empresas pequeñas ultraespecializadas para que haya un beneficio mutuo.

Este es, en mi humilde opinión, el verdadero problema de la baja productividad española, la falta de premios Nobel españoles y la escasa importancia de España en tecnología, y en casi cualquier cosas más allá del ladrillo y el turismo de sol y playa.

En mi opinión, en España desde hace ya unas cuantas décadas hay subvenciones para absolutamente todo. Se ha perdido totalmente la cultura del esfuerzo y todo el mundo quiere un “premio de consolación” que sea casi tan bueno como el primer premio, lo cual resulta nefasto. ¿Para qué intentar ser el mejor si el segundo va a tener casi lo mismo con el 10% de trabajo?

Un ejemplo de esto es la investigación, desarrollo e innovación: en lugar de fomentar la I+D+i de verdad y exigirle resultados (dentro de lo que se puede; obviamente la investigación básica por definición no puede garantizar resultados), subvencionamos acciones supuestamente de I+D+i que no son otra cosa que reventa de resultados de I+D+i de otros países. De la falta de medios para la I+D+i real ya hablaremos otro día.

Un caso concreto

Pongamos que la Agencia Espacial Española quiere que sus agentes Mortadelo y Filemón sean capaces de reparar los satélites y naves espaciales españolas en órbita.

Tal como andan las cosas hoy en día, el Gobierno de turno pondría un porrón (porroncito, que ya se sabe que para Ciencia hay bien poco dinero) de millones para subvencionar que algunas empresas (las de siempre, vamos, pero de la corrupción ya hablaremos otro día) investigaran el tema. Investigaran. Si además llegan a algo, albricias y loanzas.

El modelo estadounidense sería “ligeramente diferente”: iríamos a esas empresas y les diríamos “te compro un soldador robotizado para juntar fistros con trócolas en el espacio exterior. ¿Que no lo tienes? Pues búscate la vida porque cuando lo tengas de lo compro. Es más, aquí tienes un adelanto (no subvención: esto ya es parte del pago). Y ojo, que quiero que la tecnología sea tuya, no me vale que me revendas algo que han hecho los alemanes, rusos o japoneses”.

La diferencia

Modelo americano “compro cuando lo tengas“: si el precio por el que se va a vender el soldador espacial de fistros es 100, yo te doy ahora 30 de adelanto, cuando me enseñes una soldador de fistros en tierra otros 20 y cuando me des el soldador espacial de fistros te doy otros 50. Coste total = 100. Además, la tecnología es estadounidense y se va a vender a otros países y se va a cobrar royalties, implantación, etc. A medio-largo plazo, negocio redondo.

Modelo español “compro lo que tengas“: si tienes un producto que haga X, te lo compro. El coste total es 100 + las subvenciones que se dan. Puede ser 120, 150, 200 ó 200.000. Nótese que da igual que el producto sea propio o que seas revendedor, así que no se incentiva en absoluto que sea tecnología propia, con lo cual mayoritariamente se revende tecnología extranjera. Negocio redondo a corto plazo para que el amiguete de turno pegue el pelotazo.

Creo que la diferencia quede clara y no hace falta preguntarse porqué España anda como anda.

Corolario

Ejemplo claro de esto: las subvenciones a la energía fotovoltaica.

En España subvencionamos instalaciones, así que se ponen placas fabricadas en China con tecnología alemana.

En USA se compran placas solares que produzcan electricidad a 6 cént/kWh, que no existen, así que están obligando a las empresas de allí a ponerse las pilas en investigación.

 

FOSDEM ended yesterday and here I am sitting at Charleroi Airport (also known as “Brussels South”, quite a misleading name given that it’s 80 Km from Brussels).

I have already passed all controls, check-in and everything. While I wait for boarding, I am watching the shameful spectacle of airport personnel (let me reiterate that: airport personnel, not Ryanair’s) enforcing RyanAir’s 10 Kg cabin baggage limit. According to RyanAir, they want to minimize the weight the plane carries to use less fuel. So far, so good.

Here is what I have seen: people who do not carry any baggage (very few, they have probably checked it in because it exceeded size or weight), people who are below the 10 Kg limit and people who are way over it (and have been told to check luggage in). I am OK with those cases.

There is still a fourth case: people who are slightly over 10 Kg.

I’ve seen a woman whose bag was 10.15 Kg to be told to pay 20 EUR to check her bag, or go back to the RyanAir desk to check-in the bag. She opened her bag, took a scarf, put it on and now the bag matched the weight limit.

Yes, RyanAir is charging 20 EUR/Kg for hand baggage from 10 Kg on. What a rip-off.

A couple of East-European girls were about 1 Kg in excess each. They put a couple of extra jumpers on and now baggage was under 10 Kg.

Many people were about 1 Kg in excess. When they were told their suitcase better got lighter or pay 20 to 40 EUR. Most of them just took something (camera, food, slippers, whatever) and put in the pockets of their coats. Fortunately, RyanAir is not charging for body and clothes weight (yet?).

In all those cases the plane will end up transporting the same weight and RyanAir won’t get one more dime, so why RyanAir? Why are you such a shameful company? Why are you enforcing ludicrous and pointless policies? Don’t you know after passing the control everybody just put everything back into the suitcase? Of course you do.

So after watching this ridiculous spectacle go on for a while, I had a devious idea: let’s organize a fat people conference and fly them all over to and from using RyanAir. Further, all of them should carry exactly 10 Kg hand baggage.

Yesterday I spent the morning trying to find an easy to remember, short and nice domain for an idea of mine. Nothing really new, but it’d be useful for me to put a few programming skills I’m forgetting in practice again. After more than 4 hours, I was so frustrated I gave up: domain squatters have registered essentially any potential domain I could come with.

A lot of those domains have been registered for ten years or more, and never have been used for anything.

Many domains are registered by domain-speculator organizations like Sedo, which sell some “great domains” and then use the money to pay for all the other domains they have in the pocket.

Worst of all is the other squatted domains, the ones not owned by Sedo or the likes but by individuals. How can Joe Smith keep paying for a hundred of domains he never uses year after year? Because Google and others seem to be fine with squatters showing Google ads in squatted domains.

So here comes my message to Google: maybe you don’t do evil, but you are supporting the ones who do evil. Please enforce your already-existing AdWords policy to make ads in squatted domains a breach of policy.

Even better: I’d love if NICs started “rescuing” squatted domains.

Todo el mundo habla de la Ley de Economía Sostenible.

Más concretamente, todo el mundo habla de la “patada en la web“, la blogosfera está que hierve y los internautas indignados.

Y sin embargo, nadie dice ni mu de que se elimina la deducción por vivienda, que supone 1500 EUR al año para nuestros bolsillos.

¿Se gasta usted 1500 EUR al año en CDs y películas en DVD? Yo no.

Maniobra de distracción magistral del Gobierno, ni Goebbels, oiga.

ACTUALIZACIÓN: Me dice Pablo que no tiene efecto retroactivo, los que tenemos hipoteca actualmente seguiremos pudiendo desgravar.